ALUMINIO

Aunque en sus orígenes era considerado un metal de asombrosa rareza por su difícil extracción, hoy en día y gracias a la evolución tecnológica es un metal muy común que podemos ver en todo nuestro entorno.


Con el aluminio podemos crear líneas ligeras y elegantes, proporcionando a las grandes cubiertas y fachadas una imagen casi interminable.

COBRE

Por su alta calidad este material dúctil y maleable, nos ofrece garantía de permanecer inalterable en sus propiedades durante toda una vida, razón por la que se viene usando para embellecer, proteger y revalorizar las construcciones en las que se instala desde hace siglos. Además nos ofrece libertad para el diseño de fachadas y cubiertas porque no tendremos ningún problema en adaptarlo a formas irregulares. Por su naturaleza y resistencia no necesita ningún tipo de mantenimiento, es ideal para instalar en lugares de difícil acceso, así como en ambientes marinos.


ZINC

El zinc, utilizado desde hace siglos en el norte de Europa, es cada vez más habitual en nuestro país, aplicándolo en proyectos tanto de cubiertas como de fachadas, da un toque siempre singular y original y se adapta a cualquier forma que deseemos crear. En aleación con cobre y titanio, este material aumenta su resistencia mecánica, mejora la apariencia cuando se cubre de su pátina natural, además de soportar los cambios térmicos sin sufrir alteraciones.